Hay pocas cosas que me producen un sentimiento tan feo como los payasos.
Sí, ODIO a los payasos.
No los puedo ver, me dan pena, me dan bronca y sobre todo temor.
No es algo de ahora, viene desde hace mucho tiempo, calculo yo que desde mi más tierna infancia.
Y si mal no recuerdo, hasta sé de donde viene esta especie de fobia payasil...
Cuando tenía muy poquitos años, un par quizás había entre mis juguetes la cabeza de un payaso HORRIBLE, como la de la foto. Lo odiaba!!!.
Teníamos, con mi hermano Neno, un cofre lleno de juguetes y pedazos de juguetes en el que nos metíamos los dos y jugábamos por horas. Lo importante es que eramos niños felices y millonarios de juguetes añejos y por supuesto heredados de herencias de herencias. Y sí, no necesitabamos el juguete de moda para ser felices... y le eramos eh! hasta que llegaba ese maldito payaso semi-pelado con un gesto sádico y con olor a goma.
Era una imagen tan deprimente que imaginense, lograba deprimir a una nenita de dos, tres años.... tristisimo.
Por supuesto que los payasos me siguieron pareciendo desagradables.
Luego apareció "IT, El Payaso" y ahí creció un poco más el terror.
A mi papá le encantan los circos, así que me comí varias funciones viendo a esos pobres hombres, con la ropa rota, que siempre les pegan y que no me imagino por que tienen la cara pintada así... porque ví en una película que los asesinos se pintan una lágrima en la cara por cada muerto que pesa en su memoria... los payasos qué esconden??? ehh??? ehhh???
El pavor crecía.
Hasta que un día sucedió lo peor...
Íbamos con mi mamá y con mi hermano por Recoleta, en una de esas calles paralelas a Plaza Francia que son en subida/bajada. Eran al rededor de las 19 horas, anochecia, y ahí nomás se apareció un payaso, el más diabólico y tenebroso que se imaginen. No era como los convencionales, era cuasi moderno, con algunos detalles dorados según recuerdo. Paso por al lado nuestro, con un paso robotico, medio frenético, extrañisimo, y cuando estaba al ladito dió vuelta la cabeza hacia nosotros y nos mostró los dientes, como con una sonrisa maligna. Yo no les puedo explicar el cagazo que nos pegamos. Fue horrible.
Desde ahí no lo quise remediar mas. Lo asumí.
Sí, les tengo miedo a los payasos y qué??
Pero insisto, algo esconden tras ese maquillaje extraño, bajo esos harapos coloridos, y esas pelucas tristes.... No se dejen engañar por piñones fijos... Algo vienen a buscar...
Cuidado, un payaso puede estar atrás de tu puerta... acechando a tu familia...
No crean que me volví loca o que soy paranoica, pero fijense, miren a un payaso de manera objetiva... no son normales...
Bueno, lo dejo en sus manos. Adios!